El universo de Sara Calero (II)
Segunda entrega de las entrevistas a la gran bailaora/bailarina Sara Calero
Segunda entrega de las entrevistas a la gran bailaora/bailarina Sara Calero
Pablo San Nicasio entrevista a la bailaora madrileña Sara Calero
Fotos: Beatrix Molnar
Cantaora a la que conocimos sobre las tablas en el espectáculo “Petisa Loca”, de Sara Calero, no hace tanto, y que ahora nos presenta el directo en forma de disco “Lo Traigo Andao”. Concierto grabado en El Escorial junto al gran guitarrista jerezano Javier Patino, el violonchelo de Javier Morillas y las percusiones de Raúl Domínguez. Equipazo.
Es Gema Caballero una voz que suena a estudiada y curtida a pesar de su juventud. Y choca porque cuando la ves en persona te imaginas una voz incipiente, aún delicada y con la lógica falta de desgarro. Qué lejos de la realidad.
Este concierto es la muestra de que Gema tiene conocimiento pero también coraje para salir prácticamente sola y “rasparse” un concierto largo, difícil, tradicional con su vuelta de tuerca y con el flamenco más complejo por bandera, y salir totalmente airosa.
Formada en todas las facetas del cante y con los mejores maestros, Gema Caballero reivindica aquí otra de las caras, la solista, la del cante “alante”. Revisando cantes flamencos no muy flanqueados por los cantaores (serrana, caracoles, columpio, zambra…), otros folclóricos llevados a la estética flamenca (canciones populares españolas) y todos con su personal visión de tonos, giros y cadencias. Interesante todo como material de estudio y aportaciones de esta granaina que pisa fuerte.
Segundo disco que ya pone sobre la mesa a una cantaora con fundamentos para afrontar lo que le pongan delante. Lo trae andao y bien, además.
www.chalaura.com
Por Pablo San Nicasio @pablosannicasio
Fotografías: David Mudarra
Tremenda artista es Sara Calero, de lo mejor que se puede ver actualmente sobre unas tablas flamencas. Aunque, a decir verdad, casi a uno le dan las ganas de saber qué hubiera sido de ella hace sesenta o setenta años, porque entonces sí que habría dado juego. No se calla lo que piensa, y así baila. Hace décadas este tipo de artistas tenían pocas salidas para escoger. Y peleando por su libertad, de verdad, la Calero habría marcado tendencia.