“A afinar no se aprende”
Texto: Pablo San Nicasio Ramos @pablosannicasio
Fotografías: Elena Campos Cea @jelenfields
Llegamos al hotel y allí está Vicente Castro, “Parrita” (Nazare, Valencia. 1960). Sentado en un sillón del hall y con buen ánimo. Aparecemos con la idea de que se encuentra pletórico y de que todo lo que le sucede últimamente es bueno. Presenta disco de copla pasada por la garganta de un flamenco, con el aval de Paco de Lucía y, desde hace dos años, en pleno ascenso de cotización; pero no han sido meses fáciles en lo personal para este gitano de culto. Y nos dice por qué.
La copla es una obra de arte, la cante quien la cante ¿no?
“Desde luego. Paco [de Lucía] me llamaba tres y cuatro veces al día, de toda la vida. Éramos íntimos. Conozco a sus hijos, a su actual compañera, a Pepe… han sido muchos años. El caso es que un día me llama Paco y me dice: ¿Cómo está mi gordito? Le digo, pues bien. ¿Sigues afinando? Sí, pero ya con el azúcar, no sé… bueno, el caso es que no puedo concebir desafinar. Para Paco y para mí aquel que desafina… y hay grandes figuras que desafinan, no diré nombres”.
Y eso no hay quien lo corrija
“Puedes aprender los palos. La soleá, la siguiriya, lo que sea. Pero a afinar no se aprende. Y va a ser una pena porque puedes tener un buen metal pero no sabrás afinar. Y hay figuras mundiales, de aquí de España, mujeres y hombres, que desafinan”.
Total que te llama Paco
“Me dice: ¿Sigues haciendo esas paellas? Sí. Pues vente para Palma que quiero que vengas a meter la voz en un tema de Marifé que estoy haciendo. Esto es en abril de 2013. Así que voy para allá. Raudo y veloz. Si Paco te llama tienes que dejar lo que estés haciendo y el otro te va a perdonar, porque es Paco.
Llego a Palma, escucho el tema “Era una alondra del cielo…” hablaba de una mujer que llega a Sevilla y vivía de enamorarse de uno, quitarle el dinero, luego irse con otro… la señora tela marinera. Así que comemos la paellita, grabamos y para casa.
A los quince días me vuelve a llamar, ¿Sigues libre? Es que tengo unas cosas de Caracol… y yo extrañado ¿Pero no vale lo otro?… sí, pero… ¿Tú puedes y nos comemos un osobuco? Total que vuelvo para allá sin saber muy bien porque Paco era muy reservado. Y me puso un romance de Caracol».
¿Para qué te llamó para lo otro?
«Yo creo que él llamó a Pepe de Lucía, que es de los cuatro o cinco que saben de verdad de cante flamenco gitano. Y yo creo, es mi opinión, que Pepe le dijo que me pusiera algo de Caracol, que lo de Marifé no me pegaba y quizá malgastaba un poco mis condiciones vocales. Era un tema bonito pero no me pegaba tanto. Así que me puso unas letras de Caracol. Total que lo grabé. Y ahí conocí a otro Paco. Exigente, serio, profesional, grabando, repitiendo…. Hazme cuatro tomas más… y yo cansado. Luego él cogía las pistas, las miraba, remiraba… y cuando tienes tantas tomas al final no sabes bien qué coger. Pero él no paraba.
Bueno, estuve allí unos días y me preguntó por mi disco».
¿Cómo iba?
«Tenía unos tanguitos, baladitas, un romance… y Paco me dice que le gusta pero quiere proponerme otra cosa. Vicente haz un disco de copla. Vicente, tienes que pensar que todos los flamencos tendrían que tener un disco de copla y me estoy imaginando la copla en tu voz. Pero yo pensaba que eso estaba muy trillado y últimamente todo el que lo ha hecho lo han bordado. Pero él dijo que no, que yo sería diferente. No podía poner metales, ni baterías… sólo guitarra, percusión y que suene flamenco. Acordándose de Mairena, Farina, Camarón, Caracol… que no sea femenina y que quede flamenca, no paraba de recalcármelo».
«Ahí conocí a otro Paco. Exigente, serio, profesional, grabando, repitiendo…. Hazme cuatro tomas más… y yo cansado. Luego él cogía las pistas, las miraba, remiraba… y cuando tienes tantas tomas al final no sabes bien qué coger. Pero él no paraba»
Vaya lío
«Yo en el avión de vuelta…pensando todo eso. Llego a Barcelona y le digo a José Losada, mi productor… lo que me dijo Paco. Y me dijo que vale, que aparcaba el disco, que Paco mandaba. Que había que llamar a Josemi, Pakete, Pepe Habichuela, Juan Carmona, Tomatito. Y nos pusimos manos a la obra.
Mientras tanto Ojos Verdes, la Bien Pagá y María de la O me dijo Paco que me los producía él. Que se las reservara. Y que le hiciéramos caso porque él era un águila real que volaba alto y veía a los animales chiquititos. Vicente hazme caso porque es el momento de hacer ese disco. Y además tenía que decirle que sí, en ese instante. No valía sólo aceptar esa idea para el futuro, teníamos que grabar ya. Y que teníamos que grabar el Emigrante, Mi Niña Lola, y daba igual que lo hubiera grabado aquella o este, según Paco yo lo haría diferente. Total que en diez-quince días me puse a escuchar copla, estudiar, ver cómo lo hacían otros… Paco me decía que tenía que llevármelo a mi terreno y pegar un quejío. Que suene flamenco…»
Pero….
“El día anterior a morirse Paco, que era un guasón, me llamó diciendo que había leído una noticia en la prensa que decía que yo había empezado una dieta especial y había perdido treinta kilos. Que tuviera cuidado de no quedar desnutrido… seguimos hablando y nada, quedamos en que nos veríamos pronto porque tenía ganas de volver de México a Palma.
A la mañana siguiente pongo la radio y la primera noticia… me aparté un momento y no lo podía creer. Hacía horas que había hablado con él. Dejé de cantar y trabajar semanas. Me quedé hecho polvo. Pero es que cuando voy a ponerle la voz al disco de copla hacía tres semanas que había enterrado a un hermano mío con cincuenta años. Lo intentamos salvar pero no pudimos… (Parrita se emociona)
José Losada me dijo que qué hacíamos. Yo no estaba para cantar pero no podíamos perder un año. Mis hermanos me dijeron que no me preocupara, que siguiera con el luto pero que no dejara de grabar. Mi madre aún no sabe nada de la muerte de mi hermano, con noventa años.
Me tuve que poner las pilas y lo grabé pero lo podía haber cantado setenta veces mejor. Me pilló con mal cuerpo. Esa es mi opinión, pero José Losada dice que tiene el metal y el penar adecuado».
¿Y el otro disco?
«Todo hecho a falta de poner mi voz. Pero José Losada me llama hace unos días y dice que tiene unas versiones para mí, idea de Universal… y en eso estamos ahora. Es decir, que el disco de hace dos años cuando quiera retomarlo tiene telarañas o yo que sé. De aquí a seis meses grabo este que dice Losada y en otros seis u ocho meses el que tengo aparcado”.
Yo, cuando era pequeño e iba con mis padres de vacaciones, veía tus discos en las gasolineras
“Esa plataforma de venta, de difusión… ya no existe tanto. Esos discos del sello Olimpo, con mi foto… “
¿Y el cante flamenco puro no te ha llamado?
“Muchas veces. Paco me decía: Usted un día tendrá que ponerse a cantar flamenco y coger a su guitarrista y cantar flamenco. Un poquito por bulerías, tanguitos, unos fandanguitos del Calzá, un poco por levante, alegrías… y el público te lo agradecerá siempre. Pero te cuesta decidirte».
¿Por qué?
«Porque uno está cómodo. Y se acomoda. Paco me decía que cogiera buenos guitarristas. Pakete, Josemi, que armonizan bien. Un buen percusionista, Bandolero, Piraña o tu hijo que se vaya haciendo. Todo lo iba organizando él. Yo sólo decía si Buana».
¿En lo del flamenco le harás caso?
“Me comprometo contigo, Pablo. Que sí lo haré».
Oye y tu hermano, el Peti ¿Qué hace? Lampara Minera, mucho ojo, porque es un grande
“Sigue cantando. Hace flamenco, pero trabaja poco, por la parte de Valencia. Canta en fiestas patronales … al año hace veinticinco o treinta cosas. Con eso le vale. Ya tiene una edad y él no quiere más. Da clases de canto, gana un dineral y no quiere más. Dice que no le ofrezcamos más. Pero tiene nueve hijos, no sé cuántos nietos… en el Auditorio de Valencia haremos cosas juntos. Pero algo puntual.
Es un grande, don Antonio Piñana le escuchó cantar mientras hacía la mili y se quedó alucinado escuchándole. Antonio Piñana era el jefe militar del cuartel. Y de allí a la Unión, y se llevó tres premios, mi querido hermano”.
@pablosannicasio
Cuánta sinceridad en sus respuestas, un grande!